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Apriete de tuercas




Vía Campesina Europa se moviliza en Bruselas contra privatización de semillas; diálogo con Unai Aranguren.

En los cristales que cubren el edificio que sirve de sede al Parlamento Europeo se reflejaron este lunes 20 de enero de 2014 las banderas verdes de la Vía Campesina Internacional que desde su región europea realizó una movilización y campamento con la intención de evitar nuevas legislaciones que impidan la conservación, intercambio y cultivo de semillas autóctonas en favor de las empresas trasnacionales.

Así lo explicó a Radio Mundo Real el integrante del Comité Coordinador Internacional de la Vía, el vasco Unai Aranguren, desde la Plaza de Luxemburgo, en la capital Belga que es además corazón político y financiero de la Unión Europea (UE).

Los campesinos europeos llegaron en la mañana del lunes con la intención de sensibilizar a los legisladores sobre lo que parece no necesitar justificación: el reconocimiento del derecho de los campesinos y campesinas a intercambiar semillas.

Entre los problemas destacados por la Vía Campesina (VC) Europa figuran: la difusión de plantas y variedades patentadas, así como el riesgo de que se prohíban totalmente las semillas de granja, lo que daría lugar a la contaminación de todas las semillas agrícolas y la privatización del control público del mercado, reemplazada por ingentes estructuras privadas controladas, bien por la industria, o bien por las grandes empresas, a través de sus propios controles internos.

Esto es graficado por el dirigente vasco como “un nuevo ajuste de tuercas” desde la autoridad europea en perjuicio del campesinado de ese continente que además debe enfrentarse al dictado de normas de producción y comercialización inaccesibles para los pequeños productores e inviables para las semillas ecológicas.

Carpas, comida y una concentración de campesinos, bajo la lluvia belga, sirvió para que algunos euro-diputados se interesaran por las demandas de las organizaciones del campo.

“Para nosotros las semillas son un bien, un patrimonio de toda la Humanidad. Ellos lo ven como un negocio y nosotros como un derecho de los pueblos”, resumió Unai. La legislación a su juicio busca “controlar” las semillas para hacer “mayores negocios” por parte de las corporaciones como Monsanto y Syngenta.

En el diálogo con Radio Mundo Real, Unai profundiza sobre los mecanismos de custodia y multiplicación de semillas locales, así como el creciente interés del público consumidor al respecto, de lo cual da fe las consultas recibidas durante la movilización este lunes. Para Unai, las semillas propias y las razas campesinas de animales son el ángulo clave de la Soberanía Alimentaria, objetivo político central de Vía Campesina.

Rescate de bancos, crisis del campo
La actual coyuntura de crisis en la mayoría de los países europeos, en especial los que proveen de productos del campo a la Unión, ha generado una estrategia de “recuperación de confianza” entre el medio rural campesino y los consumidores urbanos, “que en los últimos años se había perdido”, señala Unai.

Aunque, enseguida, apunta que las corporaciones vinculadas al agronegocio vienen transformando la crisis, que en algunos casos llega hasta el hambre de las poblaciones, en una oportunidad de negocios. Una más.

La pobreza parece haberse apoderado de vastos sectores sociales de Europa con velocidad comparable a los de una guerra mundial. Según un reciente informe, las medidas de ajuste implementadas para equilibrar los más de cuatro millones de euros gastados en el rescate de bancos y estados están llevando a una explosión de los números de la pobreza tanto en el centro como en la periferia. En Portugal un 18 por ciento vive debajo de la línea de la pobreza, en España tres millones sobreviven con menos de 307 euros por mes, en Italia se duplicó el número de pobres en los últimos seis años y en el país más rico de los europeos, Alemania, casi ocho millones de personas sobreviven con sueldos de 450 euros mensuales gracias a los minitrabajos de la flexibilización laboral.

Así, las empresas han rescatado el discurso falaz del agronegocio –en base a maquinización, transgénicos, fertilizantes sintéticos y agrotóxicos- como única posible respuesta frente a la escasez creciente de alimentos suficientes, dice el integrante de Vía Campesina en el tramo final del diálogo con Radio Mundo Real que puedes escuchar en audio adjunto.



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