Intoxicadas con agrotóxicos dos niñas mueren en el Paraguay. Como ocurre con un gran número de comunidades campesinas paraguayas, el asentamiento de Huber Duré en el departamento de Canindeyú, está rodeado de monocultivos sojeros. La Federación Nacional Campesina (FNC) del Paraguay denuncia que las aplicaciones de agrotóxicos de estas plantaciones vienen enfermando fuertemente a la población de este asentamiento.

La gravedad de los hechos llegó a su punto más alto al comienzo de esta semana : el lunes 21 de julio fallecieron dos niñas por intoxicación con agrotóxicos en este asentamiento que queda próximo a la ciudad de Curuguaty. Adelaida Álvarez de 3 años de edad, murió en su casa mientras su familia se preparaba para llevarla al hospital ; su hermana menor Adela, de 6 meses, falleció tras ser dada de alta en el Hospital de Curuguaty, ya que los médicos consideraron que la niña se encontraba bien.

En entrevista con Radio Mundo Real, Teodolina Villalba, dirigenta de la FNC afirmó que los jerarcas de gobierno vinculados a la salud siguieron negando que las muertes tuvieran relación con las fumigaciones de agrotóxicos en la zona. En el asentamiento de 5 mil hectáreas viven 300 familias, entre las cuales las enfermedades son recurrentes. En los últimos días, unas 40 personas (entre ellas niños y niñas) fueron hospitalizadas, siendo que algunas de ellas debieron ser internadas.

Según Villalba, la FNC responsabiliza al Estado y sus distintos organismos tanto por estas muertes como por las enfermedades de las campesinas y campesinos del asentamiento : “los responsables están en el Estado, las políticas de salud y el SENAVE (Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas), que debe controlar que venenos se pueden usar”.

Este viernes 25 de julio por la mañana, la FNC se movilizó para exigir justicia por las niñas de Huber Duré y los pobladores y pobladoras de esa comunidad, que continúan sufriendo los impactos de las fumigaciones.

Imagen : ongambientecomarca.blogspot.com