“Nosotros somos presos políticos, lo que hicieron y están haciendo con nosotros es una persecución política, porque no hay hechos que puedan justificar que estemos en la cárcel”, comenzó diciendo en entrevista con Radio Mundo Real el dirigente campesino Rubén Villalba, que fue acusado por el Fiscal Jalil Rachid junto a otros trece campesinos y campesinas, de ser el responsable por la masacre de Curuguaty, el 15 de junio de 2012.

En la versión de la fiscalía de los hechos que dieron lugar al golpe de Estado en Paraguay, Villalba es visto como el principal responsable por los asesinatos de los 11 campesinos y 6 policías, y se le imputaron los cargos de homicidio doloso, asociación criminal e invasión de inmueble. La audiencia preliminar en la que la jueza Janine Ríos dio lugar al pedido de la fiscalia de que 11 de los campesinos acusados fueran a juicio oral y público por la masacre, fue fuertemente cuestionada por sesgos, inconsistencias, e inconstitucionalidad. Los abogados de los campesinos presentaron incluso una denuncia contra el Estado Paraguayo a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), por violación a las garantías procesales y por sistemáticas violaciones al proceso cometidas por el fiscal Jalil Rachid.

Consultado sobre los hechos por los cuales se encuentra encarcelado, Villalba afirma : “estaba todo preparado. Pero no era Lugo a quién querían echar los latifundistas y los capitalistas salvajes que están acá en Paraguay, sino a la democracia paraguaya. Lo que perdimos fue la democracia”. Y como lo mantienen todos los movimientos sociales paraguayos, Villalba recalca : “No se trato de un enfrentamiento, lo que hubo fue una masacre”.

En el tiempo que lleva en prisión el dirigente entró dos veces junto a otros compañeros en huelga de hambre para reclamar justicia y acceder a la prisión domiciliaria. La última huelga de hambre realizada a inicios de este año, logró en principio que la justicia le otorgara a los cinco campesinos que se encontraban presos, la medida. Pero Villalba fue el único vuelto a la cárcel de Tacumbú, esta vez por otras acusaciones que le habían sido hechas hacia más de cinco años.

Las medidas de lucha debilitaron la salud de Villalba, que según nos contó está perdiendo la visión en uno de sus ojos, y se encuentra con problemas cardíacos. “A pesar de esto voy a seguir la lucha, compañero. Ya tenemos en el Paraguay 4 millones de hectáreas plantadas con soja, y los campesinos e indígenas están perdiendo todas sus tierras, están viniéndose alrededor de las ciudades, acá en Asunción. Tal injusticia es la que está pasando acá en Paraguay”, concluyó el dirigente en la charla con Radio Mundo Real.

Este jueves 18 de septiembre a las 9 horas, la defensa técnica del dirigente campesino Rubén Villalba presentará un recurso de Hábeas Corpus ante la Corte Suprema de Justicia.

Escuche la entrevista completa en el archivo adjunto.